La apropiación cultural es la adopción, como forma de colonialismo, de elementos de una cultura minoritatia por miembros de la cultura dominante.
La apropiación cultural puede incluir tradiciones religiosas y culturales, pasos de baile, vestimentas, símbolos, idiomas o la música de otras culturas. Ejemplos de apropiación cultural serían el origen árabe de los números occidentales, la práctica del yoga fuera de la India o el uso de rastas sin ser de origen africanoEl jazz es el resultado de una mezcla de 300 años entre las tradiciones musicales europeas y las de África occidental..
La apropiación cultural no debe ser confundida con la aculturación, la asimilación o el intercambio cultural igualitario, ya que la apropiación cultural implica la voluntad de desnaturalizar, profanar o colonizar la cultura imitada.
Tampoco debe confundirse la apropiación con la apreciación cultural, que es cuando la imitación o adopción de elementos de otra cultura se hace por admiración o por el deseo de aprender de ella, sin el deseo de dañarla y sin privar intrínsecamente a los miembros de la cultura original de su uso tradicional.
El público general suele aplicar el mal el concepto, confundiendo apropiación cultural con situaciones como probar alimentos o aprender sobre otras culturas, que constituyen actos de apreciación.
John McWhorter, profesor en la Universidad de Columbia, ha argumentado que el préstamo cultural y el intercambio cruzado son generalmente positivos para el desarrollo cultural de los pueblos, y normalmente se hace por admiración, y sin el intento de dañar, las culturas que se imitan.
Además el término "apropiación", resulta equívoco, porque asimila la adopción de un elemento cultural al robo de un bien material limitado.
Algunos sectores también utilizan el concepto para establecer límites arbitrarios a la libertad intelectual o la autoexpresión, promoviendo sentimientos de rencor o agravio, o prácticas fascistas como la censura y el linchamiento público.
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